Expectativas transporte terrestre 2023

Este 2023 representa un reto importante para las empresas de transporte después de haber pasado dos años complicados. Lamentablemente algunas tuvieron que cerrar en 2020. Otras durante el 2021 y 2022, tuvieron procesos de ajuste para equiparar resultados. En las proyecciones económicas de organismos internacionales, se prevé un crecimiento para este año 2023.

Una de las mayores enseñanzas que nos dejó la pandemia, tanto a las empresas como las personas, es que debemos ser más maleables, mucho más adaptables al cambio, afrontar las nuevas circunstancias que enfrentemos, y ser más flexibles para ajustar programas o procesos. En el negocio de transporte se requiere visión, crecimiento, maniobrabilidad ante los cambios, buscar nuevos mercados, crear oportunidades donde antes no existían.

Como por ejemplo, hace 25 años no era generalizado el transporte de carga en vehículos con unidades de carga refrigeradas; sin embargo, hoy ya existe el transporte refrigerado de flores o de productos elaborados, alimenticios; entonces, concluimos que la necesidad del mercado ha hecho que el transporte cambie para desarrollar una especialidad que supla necesidades. Las destrezas en este año 2023 deben ser buscar los nichos de mercado en los cuales haya oportunidades de crecimiento.

Nuevos nichos de mercado versus la competencia

La competencia existe por la oferta y la demanda. Solo investigando un poquito se puede encontrar un servicio diferenciado que permita desarrollar un nicho. Por ejemplo, hoy estamos viviendo la tragedia en el sur de Colombia que ha obligado a que toda la estructura logística del transporte de mercadería que pasaba por Tulcán, Rumichaca, Ipiales, Pasto emigre hacia la otra frontera en la Amazonía por el puente sobre el río San Miguel. Eso implica modificar las operaciones logísticas con el fin de competir adecuadamente y de esa manera conservar clientes, evitando que esta carga migre al transporte marítimo. Esa situación no estaba en el ambiente, fue creada por una emergencia y las empresas tienen el reto de adaptarse al cambio emergente y migrar para suplir la condición de movilidad.

Como este ejemplo, recordemos que se están abriendo posibilidades legales de ofrecer nuevos servicios, como la facturación múltiple de actividades para las empresas de transporte, que pronto será aprobada por el Gobierno nacional. Con ello, el reto será adaptar la estructura legal para ofertar nuevos servicios que complementen la actividad de transporte y sumar servicios complementarios como: bodegaje, estibaje, vigilancia, mantenimiento, asesoramiento al cliente, inventarios, etc; es decir, una serie de servicios extra, de tal manera que al final del día, el cliente tenga mejor calidad de atención, costos más accesibles, simplificación de las gestiones y seguridad en tiempos de entrega.

Expectativas transporte terrestre 2023Preparación que necesita la empresa El aprendizaje se basa en capacitación permanente, en la formación que deben tener en todas las áreas, especialmente quienes tienen la responsabilidad de guiar y liderar las empresas. Estas cabezas deben tener una visión amplia del mercado, adaptarse a la tecnología, aplicacar nuevas metodologías, usar la inteligencia artificial para el mejoramiento de procesos, reducción de tiempos y costos.

Los roles de los directivos El gerente, líder nato de la empresa, debe prepararse formalmente para que las decisiones que tome sean las más adecuadas, tener conocimiento adecuado del manejo de personal y ser totalmente accesible a nuevos procedimientos. Tener habilidad para aprender medios digitales, informática, internet, manejo de redes que es la forma actual y moderna de llegar a sus clientes.

Los directivos deben tener al menos una formación básica de Contabilidad, porque ¿como van a tomar adecuadas decisiones financieras si no saben administrar números? También deben tener el conocimiento laboral sobre lo que deben o no deben hacer en el manejo del personal, las cuentas de la empresa y hasta los balances.

Lamentablemente hasta la actualidad, en muchos casos, los directivos de las empresas de transporte son nombrados entre quien más habla y/o puede realizar trámites o “tratar con los conocidos” para conseguir algo de las autoridades. Esta práctica tradicional arraigada en muchas empresas de transporte, hace que este tipo de nombramientos improvisados cometan muchos errores en su gestión y el liderazgo empresarial sea mal entendido.