Escrito por Lilian Aguirre
Los expertos coinciden. La Covid-19 cambiará muchas actitudes y comportamientos. También a la hora de viajar. Al finalizar el confinamiento llegará lo que han dado en llamar la “nueva normalidad” que se presenta en dos tiempos definidos por la consecución de una vacuna.
El primero de ellos se caracterizará por la convivencia con el virus y unos comportamientos sociales muy diferentes a los anteriores a la pandemia. El segundo, una vez exista una vacuna, se definirá por un progresivo regreso a la normalidad. Pero será una “nueva normalidad” , muchos de nuestros hábitos adquiridos se quedarán para siempre.
Pero viajar, viajaremos. En esto también coinciden todos. “El apetito viajero lo mantenemos, incluso está acentuado tras el tiempo de confinamiento No hay más que ver cómo aumenta el número de denuncias los fines de semana…”, afirma el profesor Pérez Redondo.
– Haremos turismo de proximidad, viajaremos por Ecuador, cerca de nuestro entorno.
– Buscaremos destinos que hayan trabajado muy bien las medidas de seguridad.
– Seremos muy sensibles al precio, porque habrá crisis económica y paro.
– Querremos destinos sin masificar, habrá un movimiento hacia el interior que puede ser una oportunidad para el Ecuador.
– Vamos a buscar alojamientos para la familia, con jardín, y si puede ser piscina, etcétera, que nos permitan disfrutar de la naturaleza pero vivir semiconfinados, sin rozarnos mucho con el prójimo.
– Surgirá un viajero más conservador y prudente que tendrá siempre en cuenta todos los valores de seguridad permanente.
– Los hoteles, y seguramente el resto de los establecimientos, incluso el destino en su conjunto, podrán certificarse como Covid- free .
Vamos a avanzar en el proceso de abandono de lo que llamamos “el postureo y vamos a vivir las experiencias”, a degustar sin prisas las vivencias… Esto se alcanza en buena medida en esa “vuelta al pueblo”, un proceso que ya se percibía pero que “se va a adelantar a consecuencia de la pandemia”, asegura el profesor Pérez